Dio origen a poblaciones y ciudades a lo largo del territorio mexicano, incluso surgieron municipios por la minería, pero que desaparecieron al cerrar las minas.
Propició la generación de la agricultura, ganadería y comercio alrededor de los centros mineros.
Se establecieron caminos (después redes ferroviarias) para atender las necesidades de la minería.
Se fundaron Casas de Moneda en México, Chihuahua, Sonora, Durango, Guadalajara, Guanajuato; Oaxaca y Zacatecas, entre otras.
Se establecieron las Reales Ordenanzas de Minería (1760-1761) para regular los trabajos de la minería.
Se estableció, en 1972, el Real Seminario de Minería en México, primera casa de las ciencias.